La revolución anti-princesas
Algo se resbala, se pierde para siempre dentro de la boca oscura para ya no volver a salir.
Nunca más.
¿Qué es ese sonido que proviene de mi interior?
Como si se reventara una nuez vieja, con aroma polvoroso.
!Al carajo!
Si uno va a perecer, mas vale irse a lo grande, por la causa, salpicando.
Por que las respiración no es solo una sucesión de suspiros: es el maldito dolor en el pecho y los colmillos afilados incustados en la piel.
¿No te das cuenta? el cañon ya lo tenemos en los labios, húmedo y dispuesto.
Solo hace falta disparar.
Bang.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio