La prochaine fois je viserai le coeur

A veces creo que la vida es así.
Que hay giros y vueltas predestinadas, inevitables.
Ese auto azul que gira a la derecha al mismo tiempo que tú....y sucede.

La maldita despedida que no llega a nombrarse...pero sucede.

Yo soy un cerebro degenerándose, poco a poco, a cuenta gotas. Cómo la lluvia que ahora mismo se resbala y muere en mi ventana. Y yo, del otro lado, no soy más que el observador, con el helado cristal pegado a mi frente.

Tras de los ojos, yo no veo almas. Sólo pared.

El aroma a lavanda que no llega a perdurar, que se pierde entre poros voraces.

"No te pareces" -Me dijo ella al ver mi fotografía.
Tal vez... en efecto... no era yo....

Esa puerta que se cierra de golpe contigo adentro....
Y sucede.